Residencia de la familia Graham

por Invitado Miér Feb 04, 2015 8:44 pm

Recuerdo del primer mensaje :

Residencia de la familia Graham - Página 6 Blithewood_mansion_1copia-1

Las rejas color negro labradas y trabajadas con múltiples arabescos, encubren un potente hechizo protector que mantiene a la Residencia Graham protegida contra posibles ataques mágicos e improperios muggles. Al traspasarlas, se puede apreciar un impecable parque color verde esmeralda que rodea a toda la estancia.

Planta baja
La puerta de entrada deja paso a un amplio recibidor el cual es enmarcado a su izquierda por una imponente escalera que lleva hasta el piso superior. Un flamante living es el que termina con la conjunción de todo el espacio. A su izquierda, un arco trabajado deja vislumbrar el elegante comedor que es usado cada vez que la familia se agranda a causa de diversas reuniones o encuentros. Una puerta conecta con una lujosa pero abastecida cocina, que a su vez conecta con otra que dá al comedor diario.
En una de las esquinas de esta planta, una sala repleta de libros oficia como la biblioteca de la familia, la cual conserva libros desde hace generaciones atrás, en su mayoría mágicos. Existe un área en la cual solo se permite el acceso mediante un encantamiento realizado por un integrante de la familia Graham. En frente de ésta se encuentra el baño principal decorado al más puro estilo victoriano.
Apenas al entrar en la estancia ya se puede dar cuenta del tranquilizante y agradable sonido que deja el agua al caer. Aquello se debe a una fuente interna que da al patio de la casa, la cual esta hechizada para poder ver en el fondo, criaturas mágicas submarinas.

Primer planta
Las escaleras desembocan en una sala de estar cuadrada de aspecto elegante decorada con sillones color crema y almohadones labrados en hilos dorados. La alfombra de un oso de las nieves esta encantada para rugir a todo aquel que no fuere bienvenido en ese piso. Protección pedida sobre todo por el señorito Danniel, ya que las visitas masculinas por parte de la señorita Blair no siempre podrían ser de su total agrado.
Las puertas de las habitaciones de la planta superior, dan todas a esa inmensa sala decorada también con fotografías mágicas. La primera habitación es el cuarto del señorito Danniel, que cuenta con baño propio. El resplandor rosado que sale de la habitación contigua, solo puede dar por hecho que la ocupante de ella es la mismísima señorita Blair. Su habitación, también cuenta con un baño privado decorado por ella misma. La tercera y cuarta habitación que le siguen a la fila, son cuartos para los huéspedes. Enfrente se encuentran los dormitorios del matrimonio Graham, y de los abuelos Graham, contando cada uno con su respectivo baño propio y vestidor. El baño principal de la seguna planta, separa otra habitación de huéspedes de un cuarto encantado contra todo tipo maldiciones y posibles roturas que pudieren ocasionar las prácticas de duelos que el señor Graham, mantiene con su pequeña y con su sobrino Danniel. Al lado, la enorme sala de resplandor dorado, es nada más y nada menos que la sala de música, la que la señorita Blair ocupa cada vez que logra con satisfacción tocar delicadas piezas musicales en el piano.

Exteriores
La puerta trasera de la mansión abre paso a la exuberante piscina de la cual soy terrible enemigo. El balcón de la terraza, es mucho más de mi agrado en noches de verano en las cuales se puede disfrutar de la luz de la luna con total libertad. Stinky, es el nombre de quien está a cargo de todo, en este caso, yo mismo, su elfo doméstico desde hace años.

por Invitado Miér Jul 08, 2015 10:31 pm

- Como no olvidemos el último par de minutos, sí que me atraganto -aquello lo dije entre dientes y le eché una miradita en plan "hasta aquí hemos llegado" porque por supuesto que había captado las suyas que parecían ser inofensivas pero yo bien sabía que eran crueeeeeeeeeeeles, por dentro se lo debía estar pasando pipa a causa de mi desgracia.

Tal vez serían nuestros hilos conectados, almas, espíritus, sexto sentido... Lo que fuera que fuese seguramente sería lo causante de provocar reacciones inexplicables desde el yo consciente, como lo fue en ese momento para mí abstraerme de la conversación entre los dos leones para girar la cabeza a ver hacia el tumulto de gente aún pasándoselo bomba en la fiesta, justo a tiempo para divisar a Alan en compañía de Dylan. Este último no parecía estar con muchos ánimos de estar ahí, pero sin embargo, por allí estaban. Alan parecía estar buscando a alguien.

- ¿Me disculpáis un momento? Debo finalizar un asunto pendiente... -volví la vista a Lucy y Lucca en ese orden, para luego volverla a mi amiga. De repente no me parecía una idea tan buena la de dejarla sola con el león, pero a la misma vez ya me encontraba tranquila de saber que estaba bien dentro de lo que cabía, a diferencia del castaño al otro lado, por lo que sentía que debía volver en la otra dirección. Aunque una vez lo medité un poco más, tal vez a ellos un momento a solas tampoco les vendría mal. Le di un apretón de manos a mi amiga para infundirle fuerza y le murmuré un "volveré lo más rápido que pueda" para luego darle un abrazo y ponerme de pie. Al pasar por al lado de Lucca, me tomé un segundo y fijé mi mirada en la suya.- Cuídala hasta que regrese. No quiero verla menos feliz de lo que ahora está. Lo digo en serio -una vez me aseguré de que me había entendido completamente, me encaminé en dirección hacia un Dylan mezclado entre el tumulto.

Durante el trayecto me pregunté varias veces si estaba haciendo lo correcto. La razón me decía que lo mejor era esperar, pero mis pies seguían moviéndose. A punto estaba de dibujar una margarita mental y comenzar a deshojar sus pétalos con un "sí" y "no" cuando me encontré a un metro de distancia. Mejor guardas la margarita para otra ocasión, pequeña.

- ¿Me acompañas unos minutos? -mi única presentación fue una leve sonrisa hacia mi primo antes de acercarme a Dylan y hacerle la pregunta en voz baja, para luego entrelazar mi mano con la suya y comenzar a abrirnos paso para salir de entre el gentío. En un momento un bailarín se me había acercado bailoteando con un botellín de cerveza en una mano, al que sonreí casi que de forma aprehensiva y mostré nuestras manos entrelazadas para que me dejara pasar. Dios, era bueno alejarnos de todo eso, el alcohol comenzaba a hacer sus efectos.

Sin decir palabra alguna me encaminé con tranquilidad hacia la parte posterior de la mansión, dirigiéndome por el terreno que se extendía hacia lo lejos varios kilómetros. Una arboleda rodeaba la extensión, siendo un gran espacio verde de terreno irregular el separador entre la construcción y una pequeña laguna. Cada vez la fiesta, el bullicio y las luces artificiales quedaban más atrás para dar lugar al sonido de la noche, que compaginaba con la luz de la luna llena que alumbraba todo el lugar. Era realmente algo grandioso y mágico de ver, muy pocas veces podía disfrutarse de la noche serena y de la posición de la luna tan cerca de la tierra, majestuosa y brillante. Su reflejo en el agua parecía seguirnos a cada paso, sin importar la dirección que tomáramos. Incluso llevábamos ya varios minutos caminando en silencio, pero no era para mí algo incómodo. Al contrario, disfrutaba de la caminata, la serenidad, dejar el caos atrás y por supuesto, de la compañía de Dylan, aunque tal hecho no lo hubiera expresado con palabras. A decir verdad, desde todo lo ocurrido no había tenido un momento para vivir paz y recién esos minutos lo eran, cosa que agradecía desde lo más profundo del corazón. Recién ahí caí en la cuenta de que tal vez Dylan habría estado esperando a que algo saliese por mi gran bocota, así que medio giré la cabeza para observarle de refilón, pero luego volví la vista al suelo para seguir caminando. Sin embargo, apreté un poco más su mano. ¿Lo habría notado o estaría tan inmerso en sus propios pensamientos como yo?

por Invitado Miér Jul 08, 2015 10:59 pm

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Ay ay ay, que a Blair le sale la veela interna y se transforma en fiera. Él se queda paradito ahí tan bonito mientras es amenazado de muerte y termina por asentir a la cabeza. Ya ha aprendido que a las mujeres es mejor nunca llevarles la contraria.
-Hey, quien llega a McDowell nunca se va menos contento, ¿para muestra no te basta un botón? -había que ver lo feliz que salía cuando chica, de su casa, luego de ver a su hermano.

-Bien pequeña, estás a mi cargo. Te vigilo -hace la mímica de colocar su dedo indice y medio en forma de "V" a la altura de sus ojos para luego señalar los de la leona mientras toma asiento en el lugar que Blair deja libre. -Los disfraces son la muerte. Además, te sienta bien -cumplido va junto con sonrisa encantadora. -Yo una vez me disfracé de cowboy. ¿Sabes lo que es eso?

por Invitado Vie Jul 10, 2015 8:08 am

De mis labios escapó un leve silbido que podía interpretarse como la risita que en realidad era, debido a que sí, efectivamente, había escuchado el primer comentario de Blair y verla en esa determinación luego de haber metido la pata como lo había hecho me dbaa risa. Volví a darle otra miradita como esas que ella definía en su pensamiento como...¿cómo era? Ah, sí, crueeeeeeeeeeeles, pero inocentes aún en apariencia. Esas miradas de amigas que valen millones, claro que sí

Me giré junto con Blair para ver a los dos muchachos pasando uno junto al otro, Alan y Dylan. Ni siquiera me acerqué a Alan para agradecerle la ayuda de hacía un tiempo durante los primeros momentos de mi inconsciencia. En su lugar observé cómo iba con Dylan y los ánimos de este a su paso; mostré una pequeña expresión de pena y asentí a las palabras de Blair, cambiando el foro de mi mirada a la castaña. Por supuesto que podíamos disculparla un momento, y todos los que necesitara aquello. Sabía que podía ser difícil, pero lo mejor que podía salir de aquelli era una buena charla que ayudase a sanar las heridas. Luego asentí una vez más con más significado cuando Blair volvió a mirarme, como cuestionándose si podía dejarme sola con Lucca en las condiciones antedichas, pero la animé a irse con los ojos grandes.

-Ve, anda- dije a continuaci´pon. Le coloqué una mano en el hombro como ánimo durante un segundo y posteriormente esbocé una sonrisa con sus amenazas hacia el rubio, que no tardó en prenderse de eso para hacer un chiste corto. Correspondí a su chiste también llevándome los dedos índice y mayor a los ojos y luego señalarlo a él con ellos, pero luego de eso crucé los brazos sobre mi pecho -Claro que me sienta bien, es un disfraz de tigre. ¿A quién no le sienta bien un disfraz de tigre?- dije como si fuera lo más obvio del mundo, y lo peor es que esta vez estaba completamente cuerda. Si estuviéramos hablando del disfraz que anteriormente había usado Blair podíamos llegar a diferir, pues cosas como esas se veían mucho mejor en personas más curvilíneas como Blair, no en desmirriadas como yo. -Claro que sé lo que es un cowboy, ¿por quién me tomas?- inquirí, haciéndome la ofendida. A mi tío Lucius le gustaban las películas de vaqueros. -¿Aún tienes el gorrito?- pregunté, divertida ante la idea, pero lo cierto era que los gorros de los vaqueros eran siempre muy geniales. Quizá lo mejor que tneían, de hecho (?).

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